Concha Velasco brilla en ese lunes en los Teatros del Canal de Madrid, en la fiesta de los nominados a los premios Goya 2013, dónde recibió su Goya de Honor. La actriz ha acaparado todos los aplausos durante esa velada, en la que se ha recordado la complicada situación que atraviesa el cine español.
Fue Enrique González Macho, presidente de la Academia de Cine, quien ha hecho mención de los momentos difíciles que vive el séptimo arte en el país, aunque ha matizado que la crisis afecta al cine "al igual que todo el mundo". "No somos una excepción", ha dicho.
Ha destacado que el 2012 ha sido un año “bueno” en cuanto a la cuota de pantalla, y aunque para González Macho "eso no significa nada", afirma que "es garantía de que la continuidad está aquí sentada".
La ilusión y el optimismo no han faltado en las palabras del presidente de la Academia de Cine, quien ha trasladado a los futuros ganadores su enhorabuena y ha señalado que quienes no sean galardonados habrán tenido el honor de "haber sido reconocidos por la profesión", el "mayor" premio de todos.
González Macho dedicó unas emotivas palabras a Concha Velasco, "un ejemplo para todos los nominados", "como persona y como profesional". "Si hacéis lo mismo que ella quizás algún día llegaréis a tener su misma juventud", señaló durante su discurso, en el que puso de relieve la "calidad humana" de la actriz que "trasciende fuera de la profesión". "No conozco a nadie que haya dicho nada malo de ti", ha subrayado.
Tras estas palabras, se ha proyectado un vídeo en el que se ha recogido gran parte de su trayectoria cinematográfica, un recuerdo en el que se han repasado algunos de los mejores momentos, algunos de los cuales la actriz ha compartido junto a Tony Leblanc y José Sacristán. Según ha bromeado la artista, "si la historia de España se pudiera contar con cómicos", los mejores ejemplos serían los dos intérpretes y ella misma.
Concha Velasco, emocionada y tras un largo aplauso, en el que todo el público que llenaba el teatro se ha puesto en pie, ha manifestado que este es "el premio más importante" de su vida. "Esto no acaba aquí, lo mejor está por llegar", ha dicho la actriz, quien afirma: "Si el cine no existiera lo habría inventado yo".
Entre bromas y chistes la intérprete ha recordado varios momentos de su vida a golpe de risa. Entre ellos, el momento en el que persiguió a Berlanga hasta conseguir un papel. "Soy muy pesada, de las que llaman a los directores", ha bromeado. Además, ha reconocido que, a su juicio, este es un premio justo: "Con más de 70 años, 125.000 películas creo que sí me lo merezco. Trabajo en el cine desde antes de que Franco fuera sargento", ha señalado.
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