viernes, 2 de noviembre de 2012

Madrid 1987, de David Trueba, en el Festival del Nuevo Cine Español, en Washington



El Festival del Nuevo Cine Español llega este mes de noviembre a Washington con la intención de mostrar una última cosecha fílmica "muy viva", pero pendiente del efecto de los recortes públicos en esta industria cultural.


Abre este inicio de mes la muestra en la capital estadounidense Mientras duermes, de Jaume Balagueró, uno de los pesos pesados del cine de terror español, que ve la filmografía española como "muy prestigiosa" a escala internacional, pero predice que se resentirá en los próximos años de la reducción de las ayudas públicas al sector.


La cosecha que puede ver ahora el público estadounidense, que corresponde a 2011 y 2012, es ecléctica, arriesgada, sorprendente y con mucha producción independiente, en palabras de la directora de de la quinta edición del festival, Marta Sánchez. "La selección va a sorprender al público y demostrarle que el cine español está muy vivo, porque las películas no están cortadas por el mismo patrón", relató a Efe la directora del festival.


Después de ver cien películas españolas en el último año, mantener "largas conversaciones" con el equipo de su productora (Pragda) y negociar el viaje de las cintas a Norteamérica, la cosecha final es de siete largometrajes que habrán pasado por diez ciudades de EE.UU. y Canadá.


El equipo del festival incluyó Madrid, 1987, una historia "intimista sobre el envejecimiento" con la firma de David Trueba; el "vanguardista" relato de Isaki Lacuesta con Los Pasos dobles, el trabajo del cineasta Gabriel Velázquez con actores no profesionales en Iceberg y la incursión en la comunidad saharaui de Pedro Pérez Rosado a través de Wilaya.


También la triunfadora de los últimos premios Goya, No habrá paz para los malvados, de Enrique Urbizu, y la revolucionaria Carmina o Revienta, la ópera prima de Paco León y que se estrenó simultáneamente en cine, DVD e internet.


Ante la reducción de las partidas al cine en los presupuestos del Estado de este año y el próximo, Sánchez cree que la industria perderá "mucho talento, pero se acabará revitalizando". "Todavía hay que encontrar la fórmula, aunque no sea con subsidios, y buscar unas reglas que beneficien al sector", añadió.

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