Finaliza en Ourense el rodaje de “O home e o can”, del director Ángel de la Cruz, una película que aborda la soledad física, la del último habitante de un pequeño pueblo gallego, la emocional, la de un hombre que llega por primera vez a una ciudad, la soledad no deseada, la que está cada vez más presente en un mundo muy globalizado.
El protagonista de la cinta es Manuel, un hombre con una discapacidad intelectual que reside en un pequeño pueblo ourensano, del que es el último habitante, con la única compañía de su perro. La cosa se complica, sin embargo, cuando el perro sufre un accidente y se ve obligado a desplazarse a la ciudad para buscar ayuda veterinaria. En la ciudad, el perro se escapa, y el protagonista asume una nueva soledad, la de no encontrar su lugar en un nuevo escenario.
“O home e o can” es un largometraje absolutamente gallego, rodado en gallego, en blanco y negro, en un pueblo ourensano --Peago, del Ayuntamiento de Cea, donde realmente vive solo una persona-- y en distintas localizaciones de la capital provincial.
Tras concluir este fin de semana el rodaje, el director confía en comenzar inmediatamente el montaje, para estar lista la película en junio y empezar su marcha festivalera.
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