La selección oficial de largos es una de más destacadas desde el comienzo del Festival de Málaga. En su 8ª edición, estuvo compuesta por Tapas, de José Corbacho y Juan Cruz, 20 centímetros, de Ramón Salazar, El calentito, de Chus Gutiérrez, Heroína, de Geraldo Herrero, Hormigas en la boca, de Mariano Barroso, Morir en San Hilario, de Laura Maña, Los nombres de Alicia, de Pilar Ruiz-Gutiérrez, Pasos, de Federico Luppi, Un rey en La Habana, de Alexis Valdés, Semen, una historia de amor, de Daniela Féderman y Inés París y Vorvik, de José Antonio Vitoria.
En un año muy difícil para los jurados, Tapas ganó la biznaga de oro de mejor película y actriz (Elvira Mínguez), allá del premio del público, y Hormigas en la boca, el premio especial de los jurados así como el de mejor actor (Eduard Fernández). Ya los premios de mejor dirección y guión fueran para Heroína.
El Calentito se llevó el trofeo de mejor fotografía y mención especial de los jurados para la actriz Nuria Gonzales. 20 Centímetros, de mejor música y maquillaje.
Uno de los más grandes destaques de la muestra, sin duda, es la interpretación de Mariano por Ulises Dumont, en Morir en San Hilario. Memorable es el orgullo del personaje con el pasado de su pueblito, su espléndido cementerio y la habilidad de sus gentes en arreglar entierros espectaculares.
Infelizmente, Pasos ha salido con las manos vacías del festival. La cinta trata de tres parejas españolas que viven en Logroño, justo en el momento de la Transición
española, después del fracasado golpe (23-F). Sus vidas tomarán diferentes rumbos con la llegada del feminismo, divorcio, aborto, temas abiertamente
debatidos entre los personajes, incluso con un memorable embate en la mesa de
una cocina.
Cosas raras en el gran cine de hoy día, ofrece esa linda peli. Pues que la vida es como los pimientos de padrón. Unos pican y otros, no.
Cosas raras en el gran cine de hoy día, ofrece esa linda peli. Pues que la vida es como los pimientos de padrón. Unos pican y otros, no.
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