Ayer, en el Festival de Cine de Alicante, se ha estrenado la comedia Muerto de amor, opera prima del director Mikel Aguirresarobe, con Marta Hazas, Ramón Esquinas y Javier Veiga en el reparto, dentro de la sección oficial.
Basada en una adaptación de la novela del escritor Carlos Cañete, la historia se desenvuelve entorno de Ángel, un barman que pierde el brazo derecho en un accidente. Tras ese hecho, desarrolla unos celos enfermizos sobre su novia Reme (Marta Hazas), de la que sospecha que le engaña con cualquier hombre que se le acerca. Entre la pareja, aparece Gabriel (Ramón Esquinas), un cocinero que vive con éxito en su trabajo. El triángulo amoroso supone un drama para los personajes, pero la historia se narra en tono cómico.
El actor y humorista Javier Veiga interpreta al personaje principal del filme. Sobre las dificultades para interpretar, ha dicho en la sala de prensa que “en efecto, me cortaron el brazo para rodar. Pero como soy gallego, tengo algo de crustáceo y me ha vuelto a crecer. Ángel es un hombre que pierde el brazo derecho y sufre de celos. Vive con un brazo ortopédico y se puede resumir lo que le sucede con una frase de la película, que dice que no puede cerrar tratos porque no puede dar la mano buena”.
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