La Fábrica de Tabacos de Sevilla, en el barrio de los Remedios convertida en un hotel malagueño de los años ochenta, acogió los dos últimos días del rodaje de “La Isla Mínima”, la nueva película del director sevillano Alberto Rodríguez, que ha terminado ayer los trabajos finales.
Raúl Arévalo y Javier Gutiérrez son Juan y Pedro, dos policías ideológicamente opuestos que trabajan en el departamento de homicidios de Madrid, son destinados a un pequeño pueblo al sur de Sevilla por una sanción, a 30 kilómetros de la capital. Allí tratarán de resolver el caso de dos jóvenes, en un primer momento desaparecidas, que finalmente son encontradas muertas con signos de violencia en las marismas del Guadalquivir, el día siguiente de la celebración de las fiestas populares.
Los agentes deberán dejar de lado sus diferencias para dar con el peligroso asesino de las chicas que lleva atacando a varias jóvenes de los alrededores durante años. Una investigación que a los aldeanos no les parece interesar, pues en el pueblo anclado en el pasado, las mujeres están menospreciadas.
Producida por Atresmedia Cine, Atípica Films y Sacromonte Films, “La isla mínima” se estrenará el 26 de septiembre del 2014 en la taquilla española.
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