El joven actor y director madrileño Eduardo Casanova ha presentado su opera prima “Pieles” en la gala inaugural Festival Internacional de Cine Fantástico de Bilbao, acompañado de su compañera de reparto en la serie televisiva “Aida” Ana Polvorosa (Lorena) y de las actrices Ana María Ayala e Itziar Castro.
“Pieles”, producida por el cineasta bilbaíno Alex de la Iglesia y rodada en tonos pastel con el rosa como color predominante, es un canto a las diferencias físicas y una reflexión sobre cómo la apariencia física que viene dada genéticamente condiciona la vida de las personas en la sociedad.
Eduardo Casanova ha señalado que en su primer largometraje ha hecho un ‘ejercicio de observación del ser humano y de la realidad, e intentado plasmar al ser humano en su máximo apogeo’. ‘Desde luego que no es una película realista -ha precisado-, sino que es como yo veo la realidad, por eso mi mayor referencia para hacer esta cinta no han sido otros directores o películas, sino la realidad misma, las señoras que al teñirse el pelo blanco se les queda lila, esos vagabundos que ves por la calle y todas esas personas que han querido decir algo que no estaba bien’.
Cuestionado por la corta duración de la cinta, una hora y veinte minutos, Casanova ha señalado que, con ello, ha pretendido hacer una película ‘directa’, en la que el mensaje llegase al espectador de forma ‘fuerte’ y ‘clara’. ‘Además -ha agregado-, mi productor, Alex de la Iglesia, me pidió que recortara la versión inicial que le presentamos, y que duraba dos horas, lo cual creo que ha sido lo mejor para la película’, que se estrenará el 9 de junio en las salas comerciales de toda España.
Casanova ha admitido que su largometraje ‘no es una película comercial, pero tiene capacidad de empatizar con todo el mundo y, además, es una película tremendamente española con la que el público español se va a ver identificado’. Preguntado si es más difícil ser actor que guionista y director, el joven realizador madrileño ha opinado que ‘escribir y dirigir es mucho más complicado pero me gusta y me llena más’.
‘Dirigir exige una responsabilidad muy grande, requiere tomar muchas decisiones, que es lo más complicado que tiene una persona, conlleva convencer a mucha gente, tragarte tu ego y tu vanidad y trabajar muchísimo’, ha concluido.
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